ese algo
Hay
días, qué sé yo qué,
como de
pronto, un algo, desconocido,
que me
aterra o que me sube,
soy yo,
estoy dentro, estoy en mí mismo.
Hay
días, qué sé yo qué,
como de
pronto, un algo, un cielo, un rocío,
un “hasta
ahora”, un “hasta siempre”,
una ola,
un infinito.
Hay
días, qué sé yo qué,
como de
pronto, un algo, desconocido,
pero que
lo siento y que está,
que viene
y que se lleva,
que trae
y como que quema.
Hay
días, qué sé yo qué,
como de
pronto, un algo,
que me
encuentro
sin saber
cómo, sin saber qué,
pero sé
que estoy,
y sé
que esos días,
sin saber
qué, sin saber cómo,
sin saber
cuándo,
sigo siendo
yo,
y sigo siendo
humano.
Porque
hay días.